Ya terminó el período estival y de seguro, muchos de ustedes se tomaron vacaciones y el regreso a la rutina ha sido más difícil de lo que pensaban. Por eso, queremos compartirles algunos consejos para que el regreso, ya sea al trabajo presencial o al colegio, sea lo más amigable posible:
Vuélvete más resistente
No importa cuán organizado y autodisciplinado seas, el cambio es inevitable tras regresar de un descanso prolongado. Y, como resultado, eso cambiará la forma en que retomes tu rutina. Cuanto antes lo aceptes, más rápido podrás recuperarte y retomar tus quehaceres. Para que esta tarea sea más fácil, te recomendamos:
Evaluación de tu nivel de control: no te fijes en lo que está fuera de tus manos ni señales con el dedo. En su lugar, concéntrate en lo que sí tienes control.
Comprobación de tus patrones de pensamiento: tómate el tiempo necesario para examinar tus patrones de pensamiento y evaluar qué tan racionales son.
Permanecer en el presente: no te quedes estancado en el pasado ni te obsesiones con el futuro. Concéntrate en lo que tienes que hacer ahora mismo.
Encontrar tus prioridades: determina qué es lo más importante para ti.
Sigue tus patrones habituales
Para ponerte al día cuando rompes tu rutina, debes seguir tus patrones habituales de trabajo. Incluso, si un día comienza con varias horas de retraso, haz las mismas cosas en el mismo orden.
Programa tus hábitos en tu vida
Dale a tus hábitos un espacio específico en tu vida y tienes dos opciones principales para que esto suceda. La primera es ponerlo en tu calendario. Sé que puede sonar demasiado simple, pero funciona porque esto te da un tiempo y un lugar para seguir adelante.
La segunda opción es vincular los hábitos a tu comportamiento actual. No todos tus hábitos encajarán en un marco de tiempo específico, pero todos deben tener un disparador que actúe como un recordatorio para hacerlos.
Si no tienes un propósito detrás de lo que sea que estés haciendo, estarás menos motivado para mantenerlo.
Tómate un día de reinicio
Nunca es fácil comenzar un nuevo hábito o volver a uno. Pero, para asegurarse de no desviarse demasiado del camino, es recomendable tomarte un día de reinicio. Este es un día de la semana en el que te tomas un descanso del trabajo y te dedicas a poner tu vida en orden.
¿No podrías hacer esto durante el fin de semana? Por supuesto. Pero, puede ser engañoso entre las tareas del hogar y pasar tiempo con su familia. Un día de reinicio de lunes a viernes, sin embargo, te da ocho horas dedicadas, sin distracciones, para ti mismo, para poner tu casa física y metafórica en orden y para recalibrar todo lo que salió mal.
Si todo falla, comience de nuevo el hábito, de la manera correcta.
Si simplemente tiene dificultades para reiniciar, es posible que deba comenzar desde el principio, con lo básico. Pero, ¿qué implica exactamente empezar desde cero?
Comienza concentrándote en un solo hábito a la vez durante 30 días. Hazlo público, date recompensas, encuentra un desencadenante y sé lo más consistente posible.
Con estos consejos y con los productos Instant volver a la rutina sin mayores problemas será posible pues preparar recetas rápidas, platos caseros y saludables no será una preocupación más.
